El consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Angel Toña, ha presentado a las organizaciones del tercer sector social los aspectos más reseñables de la nueva ley que regula su actividad, aprobada en mayo por el Parlamento.
Más de un centenar de organizaciones del tercer sector social, desde las que trabajan exclusivamente en el ámbito de los servicios sociales hasta las que lo hacen en otras esferas de las políticas sociales como el empleo o la inclusión social, han conocido por boca del consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco los principales rasgos de la ley que desde mayo regula la actividad de un sector que en Euskadi emplea a más de 35.000 personas.
Angel Toña ha destacado que la ley 6/2016 es, en primer lugar, “un reconocimiento al trabajo que realiza el tercer sector social en Euskadi en favor de la construcción de una sociedad más justa y solidaria, más cohesionada y más participativa”.
El Tercer Sector Social está formado por organizaciones sociales sin ánimo de lucro cuya finalidad principal es promover la inclusión social y el ejercicio efectivo de los derechos de las personas, las familias y colectivos que afrontan situaciones de vulnerabilidad, exclusión, desprotección, discapacidad o dependencia. En Euskadi la conforman unas 3.000 entidades que cuentan con la colaboración de 125.000 personas voluntarias.
“El objetivo de la ley es facilitar la configuración de este sector que mueve el 2% del PIB vasco, identificando sus organizaciones y redes”, ha apostillado Angel Toña en su intervención. La conformación del sector, además de fortalecerlo, permitirá desarrollar medidas para impulsar la cooperación entre las propias organizaciones, con el sector público y con las empresas privadas.
En el plano económico, el apoyo que presta el Gobierno Vasco al tercer sector social se ha materializado este año con la aprobación de una partida de 5,08 millones de euros destinada a fomentar las actividades que realizan las organizaciones en el ámbito de la intervención social, tanto en la intervención con personas, familias, grupos y comunidades, como la destinada a subvencionar actividades para el fortalecimiento de la acción voluntaria y la participación asociativa.
Fuente: euskadi.eus