La iniciativa Debagoiena 2030 presentó en Elgeta la oficina ‘El punto de la energía’, con el objetivo de fomentar las comunidades energéticas. Este nuevo proyecto tiene la ambición de apoyar y crear nuevas comunidades energéticas ya creadas.
Cambiar el modelo energético es un gran reto según la iniciativa, ya que, según explicó la coordinadora de D2030, Elena Herrarte, entre los factores que provocan la emergencia climática, el reto de primer orden es el del modelo energético: «La mayor parte de la energía que consumimos proviene de los combustibles fósiles y el objetivo es reducir la energía que consumimos en los próximos años y que lo que vamos a utilizar sea renovable. Para responder a este reto estamos convencidos de que las comunidades energéticas locales pueden desempeñar una función central».
En la presentación se señaló que el objetivo debe ser impulsar el desarrollo de los pueblos y barrios y la participación ciudadana en el ámbito de la energía, para lo que las comunidades energéticas son el camino.
La oficina ‘El punto de la energía’ tendrá cuatro líneas de trabajo principales. Por un lado, una oficina online que servirá para ayudar a los ciudadanos interesados a responder a las preguntas y que ayude a las nuevas comunidades energéticas en el proceso de constitución, que ya está en marcha.
La segunda, denominada ‘Laboratorio’, está dirigida a los agentes que trabajan en torno a las comunidades energéticas y será un espacio para compartir información.
El espacio ‘Ernamuina’ estará formado por representantes de las comunidades energéticas y será un espacio de identificación de necesidades, representación de soluciones y respuestas conjuntas. Está formado por las comunidades energéticas de Elgeta, Bergara, Ekiola del Valle de Léniz, Otxandio, Elorrio y Errenteria, así como por miembros del grupo que trabaja en la Comunidad Energética de Eskoriatza. Goiener, Mondragon Unibertsitatea y miembros de D2030 forman parte de ‘Ernamuina’.
Y la cuarta línea es la de divulgación y empoderamiento, adelantan que en esta línea de trabajo se van a llevar a cabo diferentes acciones dirigidas a la sensibilización y al empoderamiento de la ciudadanía.
En la presentación de la oficina se explicó que en Debagoiena hace tres años se comenzó a trabajar en torno a las comunidades energéticas. Además, se determinó que tres o cuatro más están en proceso de creación.
Sin embargo, han encontrado dificultades en el camino. Dicen que la primera dificultad suele ser la de la viabilidad económica: «La mayoría serán comunidades pequeñas, con poca capacidad para desarrollar nuevos proyectos. Si no se reúnen, costará empezar a trabajar la economía de escala». Y añaden que la oficina está concebida, entre otras cosas, para encontrar soluciones y ayudar a este tipo de problemas.
Fuente: Naiz