Basándose en numerosas fuentes de datos y ejemplos de países, el nuevo informe de la OCDE analiza el empleo femenino en la economía social y solidaria (ESS), explora los retos para la igualdad de género en la (ESS) y ofrece recomendaciones políticas para reconocer el trabajo y el liderazgo de las mujeres en la ESS y en la economía en general. También sugiere formas de fomentar su participación en sectores de alto crecimiento dentro de la ESS, como los sectores verdes y de uso intensivo de tecnología.
La economía social y solidaria proporciona puestos de trabajo para las mujeres y puede contribuir a promover la igualdad de género en un sentido más amplio. La igualdad de género en el lugar de trabajo sigue siendo un reto a pesar de los considerables esfuerzos realizados a lo largo de los años para abordarlo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) estima que la discriminación de género en las leyes formales e informales, las normas sociales y las prácticas cuesta a la economía mundial 12 billones de USD, el 16 % de los ingresos mundiales (Ferrant y Kolev, 2016). Reducir la discriminación podría suponer un aumento medio anual del producto interior bruto (PIB) mundial de entre 0,3 y 0,6 puntos porcentuales para 2030 (Ferrant y Kolev, 2016).
Como vehículo para crear empleos con impacto, la economía social y solidaria (ESS) también puede desempeñar un papel importante en la consecución de la igualdad de género. Según las estimaciones, la ESS ya proporciona hasta el 10% del empleo en muchos países (por ejemplo, Bélgica, Francia y España) y más del 60% de los empleados de la ESS son mujeres. En la Unión Europea, las entidades de la ESS emplean a más de 13,6 millones de personas, lo que representa el 6% de la mano de obra total (Monzón y Chaves, 2016).
En el Cuestionario de Igualdad de Género (GEQ) de la OCDE de 2021, los países han señalado que hacer más accesibles los servicios de guardería, mejorar el acceso de las mujeres a empleos de mejor calidad, facilitar a las mujeres la combinación de trabajo remunerado y no remunerado y erradicar la brecha salarial de género son las palancas más importantes para aumentar el empleo femenino (OCDE, 2022). La ESS contribuye activamente a estos objetivos. Además de proporcionar puestos de trabajo, las entidades de la ESS ofrecen servicios de guardería en muchos países (por ejemplo, Francia, Italia, España) y muestran resultados prometedores en términos de reducción de las diferencias de género en el liderazgo y la remuneración (por ejemplo, España).
Este informe ha sido elaborado por el Centro de la OCDE para el espíritu empresarial, las PYME, las regiones y las ciudades (CFE), dirigido por Lamia Kamal-Chaoui, Directora, como parte del Programa de Trabajo de Empleo Local y Desarrollo Económico. Ha sido elaborado con el apoyo financiero del Instrumento de Asociación Exterior de la Unión Europea en el marco de la Acción Global de la OCDE “Promoción de Ecosistemas de Economía Social y Solidaria”.
El informe ha sido elaborado por Amal Chevreau y Natalie Laechelt, Analistas de Políticas, con la orientación de Antonella Noya, Jefa de la Unidad de Economía Social e Innovación Social, y bajo la supervisión de Karen Maguire, Jefa de la División de Empleo Local, Competencias e Innovación Social. Rosa Belén Castro Núñez, Profesora Asociada de Economía Aplicada en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid (España), proporcionó valiosa información y análisis de fondo y también apoyó la redacción del informe. Fuente: Artitzar Erauskin – Coordinadora de OVES/GEEB
Fuente: Artitzar Erauskin – Coordinadora de OVES/GEEB