2022 fue un año atípico, a la anomalía que supuso la pandemia, se añadió la invasión a Ucrania, que, junto con la huelga de transportes y la sequía, crearon un nivel de incertidumbre e inestabilidad que han redefinido los modelos de producción, las cadenas de suministro y la distribución de bienes y alimentos.
KONFEKOOP
Para la Confederación de Cooperativas de Euskadi, KONFEKOOP, ha sido un buen ejercicio: ha crecido en actividad, repercusión, cooperativas y empleos.
A 31 de diciembre de 2022, son 1.391 las Cooperativas asociadas con un incremento neto de 41 cooperativas, respecto al ejercicio 2021. En cuanto al número de empleos, alcanza la cifra de 56.762. En líneas generales, la evolución en materia de empleo es positiva, confirmándose la característica anticíclica del cooperativismo, que le hace crecer en contextos adversos. “2022 es el segundo año de nuestro Plan Estratégico 2021-2024 que recoge, como ejes fundamentales, ampliar la representación e influencia, multiplicar la intercooperación y apoyar más y mejor cooperativismo”, explicó Iñaki Nubla, director de KONFEKOOP, durante una rueda de prensa celebrada en Bilbao.
El impacto de la inflación que afecta a la población en general y a las empresas cooperativas, ha presentado el reto de hacer frente a un nuevo escenario de costes y a la vez, seguir siendo empresas competitivas. En esta línea, desde KONFEKOOP aseguran que las características propias del modelo cooperativo vasco: “participativo, solidario y arraigado en el territorio”; permiten identificar de manera ágil las necesidades de cambio a las que se enfrentan los múltiples sectores del tejido productivo.
“La esencia de nuestro modelo nos hace seguir siendo competitivos”, afirmó Rosa Lavín, presidenta KONFEKOOP. El cooperativismo vasco ha alcanzado un nivel de madurez importante, como reflejan los datos de crecimiento de 2022, en parte gracias a la colaboración con el sector público.
Entre los objetivos de la agrupación empresarial de cooperativas de Euskadi para 2023, se encuentra incrementar el número de empresas cooperativas asociadas y el número de empleos, afianzar el ámbito de cooperación con las instituciones, fundamentalmente con Gobierno Vasco y Diputaciones Forales. Asimismo, otra de las metas de KONFEKOOP para el año en curso, es seguir avanzando en la extensión del modelo cooperativo, adaptándose e innovando de manera ágil y rápida, ofreciendo soluciones que den respuestas a necesidades emergentes.
ASLE
La Asociación de sociedades laborales y empresas participadas de Euskadi celebró el pasado 12 de mayo su asamblea general en Donostia. El acto fue inaugurado por la vicelehendakari Idoia Mendia y clausurado por el lehendakari Iñigo Urkullu.
El presidente de la asociación, Kepa Olivares, aludió a uno de los problemas que adolecen muchas empresas como es el relevo generacional, aún más en la actualidad en la que comienza a sentirse los síntomas de una evolución demográfica a la baja.
En este contexto, defendió los procesos de relevo en la propiedad a favor de los trabajadores porque, según explicó, ayudan al mantenimiento del empleo y al arraigo de la empresa en el entorno frente a las deslocalizaciones. Ventajas como incentivos fiscales a la sucesión empresarial, sobre todo si no existe un relevo familiar natural, beneficiaría el fortalecimiento de un tejido empresarial con este modelo.
En su última comparecencia en la asamblea como presidente tras seis años al frente de Asle, Kepa Olivares definió a la sociedad laboral y empresa participada como “un modelo de emprendimiento colectivo de éxito” en una afirmación que fue compartida por el lehendakari, Iñigo Urkullu.
“Sois un ejemplo de compromiso y perseverancia, de que creer es el primer paso para poder”, asegó, para valorar el compromiso con la generación y mantenimiento de empleo de calidad y con la participación en las decisiones y la gestión de estas empresas donde los trabajadores acceden a la propiedad.
Fuente: Tulankide + Noticias de Gipuzkoa