Las regiones y ciudades quieren aprovechar el potencial de la economía social y el emprendimiento social para apoyar la transición hacia modelos económicos social y ambientalmente más sostenibles y más resilientes en la UE. Sin embargo, la UE debe establecer condiciones marco más favorables para que florezca la economía social. Esto requiere abordar la diversidad actual de definiciones y marcos legales y facilitar el acceso a la financiación y los mercados.
Estos son los mensajes clave de una opinión redactada por Ricardo Rio, alcalde de Braga, y aprobada en la sesión plenaria del Comité Europeo de las Regiones el pasado 8 de febrero.
En Europa hay 2,8 millones de empresas de economía social, que representan el 10% de todas las empresas de la UE. Casi 13,6 millones de personas (alrededor del 6,2 % de los empleados de la UE) trabajan para empresas de economía social. Además de la mano de obra remunerada, la economía social moviliza voluntarios, equivalentes a 5,5 millones de trabajadores a tiempo completo.
Con este dictamen, el Comité Europeo de las Regiones presenta sus sugerencias antes de la próxima propuesta de la Comisión Europea de una Recomendación del Consejo sobre el desarrollo de las condiciones marco de la economía social, que figura en el programa de trabajo de la Comisión Europea para 2023. El Comité destaca el fuerte arraigo local de la economía social y pide a las autoridades nacionales que permitan a las entidades locales y regionales aplicar las medidas que mejor se adapten al contexto local para apoyar el desarrollo de la economía social en su territorio, aprovechando también la cooperación disponible de la UE.
Para crear un entorno favorable para las organizaciones de la economía social se necesitan iniciativas legislativas a nivel europeo y nacional en materia fiscal, contratación pública, ayudas estatales, formación y educación, etc.”.
El dictamen también señala la falta de definiciones y métodos de recopilación de datos comunes en Europa, en particular a nivel local y regional. El Comité reitera su petición de un marco jurídico europeo más favorable para la economía social que abarque todas sus diferentes formas, como cooperativas, mutualidades, asociaciones, fundaciones y empresas sociales. En este sentido, las regiones y ciudades acogen con satisfacción que la Comisión Europea vaya a presentar una iniciativa legislativa sobre las actividades transfronterizas de las asociaciones en 2023.
También es importante mejorar las campañas de educación, formación y comunicación sobre economía social, incluida la financiación y el apoyo de la UE disponible para el sector.
Finalmente, el Comité hace un llamado a todos los niveles de gobierno para crear estrategias a largo plazo y bien financiadas para promover la economía social y establecer esquemas de apoyo más informales y accesibles. También sugiere establecer un Observatorio formal de la Economía Social en Europa.
Fuente: Comité Europeo de las Regiones